Recientemente los empresarios se han dado cuenta que todos sus esfuerzos deben ir dirigidos a satisfacer las necesidades del consumidor. Tener una buena estrategia de atención al cliente es hoy por hoy un aspecto indispensable en cualquier acción de marketing. De hecho, los especialistas del sector aseguran que fidelizar es ahora más necesario que nunca. Los negocios de cara al público no pueden permitirse el lujo de dejar a un consumidor descontento.
Para ello, con el objetivo de mantener una atención al cliente más efectiva y de calidad, muchos negocios contratan un servicio de Mystery Shopping que permita conocer la calidad del servicio prestado por sus empleados. Esta técnica consiste en enviar al comercio un detective para que se haga pasar por comprador y evalúe el trato recibido. A partir de las impresiones que tenga, elaborará un informe sobre aspectos como la limpieza, la imagen de marca, la presentación del producto y la atención recibida. El principal logro del mystery shopping es, a partir de una opinión externa al negocio, detectar posibles fallos que se producen en el punto de venta, especialmente de sectores como la restauración, la alimentación, hostelería y tiendas de distribución en general.
Los últimos años esta técnica ha sufrido una reconversión y se ha extrapolado al sector del comercio online. El Mystery Shopping en Internet, también llamado como Mystery 2.0, es un recurso que últimamente está creciendo mucho ya que son varias las tiendas online que quieren analizar la seguridad de sus pagos online, presencia en redes sociales, plazos de entrega, devoluciones, etc.
En Delphos Detectives llevamos más de una década ofreciendo este tipo de servicios y han sido las propias necesidades del mercado, a través de las plataformas online, las que nos han obligado a redimensionar el servicio y ofrecer también servicios de Mystery Shopping por Internet. A través de una delicada fase de análisis e intrusión en el comercio, elaboramos un informe detallado sobre la calidad de la atención al cliente de sus empleados, siempre en base a las necesidades de cada cliente, y evidentemente, con un trato personalizado y de calidad.